«Síganme y haré de ustedes pescadores de hombres»

«Jesús se acerca, fija su mirada en  aquellos cuatro pescadores y los llama a  dar una orientación nueva a sus vidas.   SIN SU INTERVENCIÓN, NO NACE NUNCA UN VERDADERO CRISTIANO.  Los creyentes hemos de vivir con más fe  la presencia viva de Cristo en cada uno  de nosotros. Si no es Él, ¿quién puede  dar una nueva orientación a nuestras vidas?»

 

«Hemos encontrado al Mesías.»

«Una vez que conocemos a Jesús, es natural llevar a otros  a Él. Si nuestra experiencia dice que no hay nada mejor   que conocerlo y vivir con Él, no vamos a dejar que los  demás se lo pierdan. Esto es lo que hizo que Andrés  llevará con Jesús al primero que se encontró ese día, que  fue su hermano Simón. Señor, ¡hazme un apóstol  incansable de tu misericordia!».

 

«Postrándose, lo adoraron»

«Buscar y adorar como estilo de vida, es una buena  enseñanza. Buscar al Dios que se ha querido manifestar,  que nos ha buscado primero, que ha salido a nuestro  encuentro. Adorar, como consecuencia que nace del  darnos cuenta que no ha habido nadie  que haya tenido por nosotros –es decir, por ti–  un acto más grande de amor.»