Corresponsabilidad
ACOMPAÑAR E INVOLUCRARSE CON LAS PERSONAS.
La caridad cristiana no es simplemente hacer o dar algo bueno. Es mirar al otro con misericordia, con los mismos ojos que Jesús, porque lo vemos a Él reflejado en el rostro de los demás. No es sentir lástima, «pobrecito, qué pena». «Es acompañar e involucrase teniendo la conciencia de que hoy, en esta pandemia, o nos salvamos todos o no se salva nadie» (cf Papa Francisco, Fratelli Tutti, n. 137). Todo lo que sucede y lo que hacemos o dejamos de hacer afecta a todos.